Luego del parate obligado que sufrieron los Boston Celtics luego de los múltiples casos de jugadores inhabilitados por el rastreo de contacto con casos positivos de COVID-19, el equipo dirigido por Brad Stevens pudo regresar a la acción con doce disponibles para enfrentarse a los Orlando Magic que están muy mermados por las lesiones de múltiples jugadores de su rotación principal.


Con las ausencias de Jayson Tatum, Robert Williams, Carsen Edwards, los Celtics salieron a la cancha con Jeff Teague, Marcus Smart, Jaylen Brown, Grant Williams y Tristan Thompson.

Boston pudo tomar control del partido desde temprano con un nivel muy sólido de Jaylen Brown, Jeff Teague castigando al novato Cole Anthony en ambos costados de la cancha y una consistencia en ambos costados hasta el momento desconocida.

Segunda mitad para enmarcar de los Celtics

En el tercer cuarto, cuando los Magic se acercaban peligrosamente en el marcador, los Celtics sacaron una explosión ofensiva del bolsillo con momentos brillantes de la banca. Payton Pritchard y Semi Ojeleye fueron brutales, combinándose para 34 de los 66 puntos que anotaron los suplentes.


Seis jugadores de los Celtics terminaron en dobles digitos, con los 21 de Jaylen Brown como máximo anotador de la victoria abultada por 124-97 en la que hubo tiempo para que Tacko Fall metiera un doble pisando la línea perimetral que se hizo viral inmediatamente entre la peculiar fanaticada de los Celtics.


Boston se queda en casa para medirse este domingo contra los New York Knicks a la 1:00 p.m. del este en el primer enfrentamiento entre ambos equipos de la accidentada temporada 2020-2021.


 

Foto: Celtics.com