Los Boston Celtics disputaron el cuarto partido de la serie en el Wells Fargo Center de Phladelphia y con el, una pésima presentación en la que pudieron mantenerse en juego a lo largo de los 48 minutos. Sin embargo, los árbitros y una llamativa actuación en la segunda mitad, junto al intratable TJ McConnell le dieron la victoria a los Sixers por 103-92 y forzaron el quinto partido en Boston el próximo miércoles.

Desde el inicio, los Celtics no lograron sentirse cómodos en la ofensiva ni encontrar el ritmo que habían logrado establecer en los primeros partidos de la serie. Con un nefasto 30% de campo en el primer cuarto, tuvieron suerte de que los Sixers estuvieran igualmente erráticos y tenían ventaja de 22-21 con cinco puntos de Jayson Tatum. En el segundo cuarto, Shane Larkin cayó lesionado en su hombro izquierdo y no pudo regresar al partido. Con varios jugadores en problemas de faltas a raíz de lo sensibles que estaban los árbitros, la ventaja pasó para los locales de cara al descanso, con 8 puntos de Rozier y 7 de Smart.

Los silbatos no dejaron de sonar en toda la segunda mitad con un Tony Brothers que parecía extasiado de pitar cada jugada ante el más mínimo contacto en contra de Boston. A partir de ahí, los Sixers lograron crear una brecha ante los Celtics de 11 puntos de cara a los últimos doce minutos del encuentro, mientras que los de Brad Stevens eran liderados por los 15 puntos de Jayson Tatum. 

La remontada no pudo llegar en esta ocasión porque los Celtics simplemente fallaron un montón de tiros abiertos que les habrían dado la posibilidad de meterse en partido. Sin efectividad en el perímetro.y con la chispa que tenían los locales, las cosas fueron más sencillas para los Sixers que encontraron en la salida de Covington y el ingreso de McConnell, el factor x que tanto necesitaban. Jayson Tatum, por su parte, terminó con 20 puntos por sexta ocasión consecutiva y se convirtió en el primer Celtic en hacerlo desde Paul Pierce en el 2009 y espera cerrar la serie el miércoles en el quinto y decisivo juego en Boston para jugar las finales de conferencia contra LeBron James y sus Cleveland Cavaliers.

 

Foto: Celtics.com