Una película completamente dividida en dos partes opuestas. Eso fue el partido entre los Boston Celtics y los Milwaukee Bucks que lograron quedarse con una victoria 116-105 con 32 puntos, 6 rebotes y  6 asistencias de Kemba Walker junto al inmaculado Jayson Tatum que anotó 25 puntos (con 20 de ellos en la segunda mitad) que lideraron al equipo de Brad Stevens en una victoria titánica ante un peso pesado de la liga.


La primera parte fue fatídica para Boston. Ausencia en la defensa exterior, una banca de los visitantes asesinando a los verdes y unos Bucks completamente encendidos le ponían las cosas muy difíciles a los de Stevens en el primer choque contra el griego Antetokounmpo desde aquella eliminación en la última postemporada.

La defensa de Semi Ojeleye sobre el griego, el box-out de Marcus para sacarlo del camino y en especial, la explosión ofensiva de Tatum (choque de manos con Paul Pierce mediante) que desencadenó una racha de 13-0 para finalizar el tercer cuarto fueron las claves para virar el juego hacía su lado de la balanza y finalmente, Boston supo manejar la ventaja para quedarse con una victoria tremenda ante Milwaukke por 116-105 en condición de local.


Los Celtics vuelven al ruedo el viernes a las 6:30 pm del Este, cuando reciba a los New York Knicks en el segundo enfrentamiento de la temporada ante el pálido equipo neoyorkino en la indescifrable temporada de la NBA.

 

 

Foto: Celtics.com