El día ha llegado, después de un parate de varios meses, el arribo a la burbuja de Orlando, las dudas por la salud de Kemba Walker y los partidos de preparación, los Celtics retoman el último tramo de temporada regular y miran de reojo a los Playoffs.

Los partidos de preparación de los Celtics

 

Poco han dejado estos juegos de preparación para los Boston Celtics. Sin Kemba Walker en su primer amistoso frente a OKC, y con un equipo oxidado  tras las vacaciones forzadas, la imagen dejada no fue de las mejores.

Lo que se pudo observar en la derrota ante los de CP3 es más de lo que veníamos viendo antes que se detuviera la competición por la pandemia de COVID-19: un equipo previsible en ataque, lento en la transición defensiva y permeable en los tableros.

Salvo Jaylen Brown, todos sus compañeros se vieron faltos de ritmo, erráticos y forzando situaciones en ataque (Jayson Tatum sobre todo).

 

 

El segundo encuentro ante Phoenix Suns, tuvo la participación en cancha de Kemba Walker por apenas 9 minutos. El lado positivo es que no se lo vio mermado desde lo físico, pero con la sensación de que sin el base la ofensiva verde se derrumba a pedazos.

La importancia del ex de Charlotte para el ataque de los Celtics es notoria. Quedó claro que si el 8 no está en cancha todo recae en un Jayson Tatum que no tomó decisiones inteligentes, se abrazó al uno contra uno, ejecutó tiros ineficientes y no dejó que la dinámica propia de los sistemas le llevaran el juego a sus puntos y zonas calientes.

Otra vez Jaylen Brown mostró ser el camino más fiable, junto a un Gordon Hayward que sigue siendo poco utilizado en ofensiva. El ex de Utah se las tiene que arreglar con lo poco que le dejan sus compañeros, que pasan deliberadamente de él en innumerable cantidad de oportunidades. Pese a esto, Hayward se las arregló para ser una carta de gol segura y alimentar siempre la fluidez del juego.

El 20 parece ser el único que siempre piensa en el motion offense, haciendo el pase extra y atacando cuando está creada la ventaja, buscando a sus compañeros cuando están mejor posicionados.

Marcus Smart fue otro de los factores de buen rendimiento, pese a que tuvo dificultades con el traslado y las pérdidas de balón. El capitán es el alma del equipo y su rendimiento marca el ritmo de juego de sus colegas.

 

 

El último juego ante Rockets solo sirvió para reconfirmar que la banca no es solución para Stevens. Grant Williams, y algunos pasajes de Semi Ojeleye, fueron las únicas actuaciones destacables. Los demás, lamentablemente no son confiables para desarrollar minutos importantes en postemporada.

En estos ocho partidos que se aproximan en el futuro inmediato, lo más importante para el conjunto verde parece ser recuperar a Kemba Walker, que es el factor número uno para que los Celtics tengan alguna oportunidad de llegar lejos en postemporada.

Lo que resta de temporada regular

 

Este viernes los de Massachusetts se verán las caras con el mejor equipo del Este y uno de los candidatos de fierro para llegar lejos en Playoffs: los Milwaukee Bucks.

Los de Giannis Antetokounmpo no contarán con la participación de Eric Bledsoe (dio positvo COVID-19) y Connaughton, aunque esto no repercute sobremanera en los puntos fuertes de los ciervos.

Los Celtics tendrán a un Kemba Walker con restricción de minutos, lo que le complica sobremanera el planteo ofensivo a Brad Stevens. El 8 fue la carta de gol y el jugador más importante para romper el entramado defensivo de los Bucks, por lo que tendremos que ver que tipo de modificaciones tácticas realizan los verdes para paliar esta situación.

Es de vital importancia obtener la victoria teniendo en cuenta el calendario que se le viene los días subsiguientes, y pensando en la diferencia que existe con los Toronto Raptors si el objetivo es ir en busca de esa segunda posición.

Una derrota de los Celtics y una victoria de los Dinos, deja prácticamente inalcanzable al conjunto canadiense y cambia considerablemente el planteo de los encuentros posteriores.

 

Repasemos el calendario en esta vuelta a la actividad

La brecha de dos partidos entre el conjunto de Nick Nurse y el de Stevens parece ser alcanzable si tomamos en cuenta el calendario de los primeros y que la ventaja entre enfrentamientos individuales beneficia a los segundos, pero para efectivizarlo será clave llegar con chances a ese encuentro contra los de la hoja de maple.

Otra de las cuestiones a tomar en cuenta, es que si los Celtics no tienen buenas actuaciones en los partidos venideros pueden comprometer su tercera posición. Estos tendrán que mirar de reojo a Miami si no quieren complicar su futuro en postemporada.

No es óptimo este retorno, el factor cancha no se sabe como afectará a los equipos y el parate al rendimiento de los jugadores, todo dependerá de la salud de Kemba Walker y la adaptación a una situación que, ya de por sí, no es la ideal. Pese a lo dicho, la vuelta a la actividad y la perspectiva de volver a ver al equipo renuevan las esperanzas, que están más vigentes que nunca.