Tras la marcha de Gordon Hayward a los Charlotte Hornets por 4 años y 120 millones, Danny Ainge tuvo que activar el plan de emergencia y fichar a dos veteranos para apuntalar un equipo que se quedaba cojo. Con los fichajes de Tristan Thompson y Jeff Teague, los Celtics consiguen presencia en los tableros y un buen suplente para Kemba Walker, tras una segunda noche de agencia en la libre en el que las cosas se complicaron. Así mismo, se han garantizado los contratos de Daniel Theis y Semi Ojeleye.


 

La decisión de Hayward

 

Gordon Hayward decidió ir en contra de todos los rumores para aceptar un verdadero pastizal del equipo de Michael Jordan y Terry Rozier. Ya en su día, cuando se terminó su contrato rookie y salió por primera vez al mercado, Hayward firmó con los de Charlotte, oferta que igualó Utah y que dejó al alero molesto con la franquicia que lo escogió en el Draft.

Tras un par de días de agencia libre, y con todo apuntando a una vuelta a Indiana, Hayward decidió aceptar una oferta inigualable para unos Celtics que se vieron con las manos atadas. No podían ofrecer ese dinero al alero, y parece que el jugador no tenía tantas ganas de volver a su casa (aunque la oferta de Myles Turner y cosas que se rumoreaba no encandilaba a casi nadie).

Los agentes libres, como bien dice el propio calificativo, son dueños de su destino, y Hayward ha elegido ser el perro grande de un equipo modesto, cobrar bien en su último gran contrato, e intentar llevar a los Hornets a Playoffs. Se rumorea que nunca estuvo conforme con su papel de cuarta espada en Boston, algo respetable, y que quería buscar dejar un legado más grande en otro sitio. Mucha suerte, Gordon, las lesiones no nos dejaron disfrutar del mayor fichaje que han hecho los Celtics en años, saluda a Terry de nuestra parte.

 

Tristan Thompson y Jeff Teague, dos refuerzos de garantía

 

Tras el varapalo de perder a otro jugador de contrato máximo en la agencia libre, Danny Ainge se vio en una tesitura complicada. No había mucho dinero que gastar, y las opciones que iban saliendo, como Paul Millsap, decidían irse a otros equipos.

Los Celtics seguían necesitando refuerzos urgentes para una rotación interior que había perdido a Kanter y Poirier, y para un banquillo que necesitaba algo de canas entre tanto chavalito. La llegada de Thompson y Teague, consigue ese objetivo, proporcionando un plus a una plantilla que mejora en cuanto a profundidad.

El pívot ex de los Cavaliers, llega por dos años y 19 millones de dólares (la Mid Level Exception completa), y competirá con Daniel Theis por el puesto de titular.

Thompson aportará veteranía, rebote y defensa a la pintura de los Celtics. Tanto de suplente, como de titular, es un refuerzo muy interesante para sustituir a Enes Kanter, dando la misma o mejor producción en los tableros, y no siendo un agujero en defensa. Además, el año pasado fue el comienzo de un intento de extender su rango hasta la línea de tres, con muy buenos resultados en no demasiados intentos.

 

 

Por su parte, Jeff Teague llega para cubrir la posición de base suplente que cumplía un Brad Wanamaker que ha firmado con los Warriors. Si bien Teague ya ha pasado sus mejores años, sigue manteniendo un nivel de producción interesante para su rol. Su nivel como organizador sigue siendo bueno, y los Celtics van a agradecer algunos puntos desde el banquillo. Por otro lado, tener un base de garantías entre tanto jovenzuelo, permite a los Celtics cuidar mejor las rodillas de Kemba Walker.

 

 

El equipo, sin duda, ha perdido calidad con la marcha de Gordon Hayward, pero añade piezas interesantes que refuerzan, y mejoran, un banquillo que dejó mucho que desear el año pasado. No nos engañemos, a día de hoy, y por talento, los Celtics no son mejor equipo, pero sí que se ha aumentado la profundidad de una plantilla algo corta en las rotaciones.