Los Boston Celtics visitaron el American Airlines Center en Dallas, Texas para medirse con los Mavericks del ausente Luka Doncic y el potente Kristaps Porzingis. En un partido apretado, los Celtics de Kemba lograron sacar una victoria de oro ante las ausencias de Marcus Smart, Robert Williams, Gordon Hayward y Vincent Poirier. 

En la primera parte, el encuentro estuvo parejo por completo. Contando con un Kemba Walker totalmente encendido en el primer cuarto (16 puntos con 3 asistencias en la mitad), los Celtics tenían ventaja aprovechando que en los Mavs, Porzingis no entraba en ritmo del todo.


Sin embargo, en el segundo parcial, tanto el letón como Seth Curry con un festival de triples y Jalen Brunson con su férrea defensa, cambiaron el flow del juego a favor de los locales y tomaron el control en el marcador. El pobre 23.5% desde la línea de triples era letal para los Celtics, que además tenían que sufrir los 13 puntos con 9 rebotes para Porzingis, con los texanos arriba por 55-50.

El tercer cuarto fue de rachas, pero Boston logró ponerse al frente con un buen cierre de parcial, cambiando constantemente de marcas y aprovechando desatenciones de los Mavericks. Ah, y Grant Williams metió un lindo triple para toda la alegría de la gente.

Con una magistral ejecución en el clutch, liderados por un fantástico Kemba Walker, Boston desequilibró el partido al final del encuentro. Anotando en los momentos decisivos y aprovechándose de la facilidad del quinteto bajo para intercambiar marcas, le complicaron la vida a los Mavs. A pesar de fallos al cierre del juego, los Celtics lograron liquidar el partido por 109-103.

Kemba Walker fue el máximo anotador de los Celtics, con 32, que junto a los 26 de JB y los 24 de JT, sumaron 82 de los 109 tantos bostonianos en una victoria muy valios a ante tantas lesiones sufridas y, logrando así, cerrar la serie ante Dallas con dos victorias en la campaña.

 

Foto: Celtics.com