El verano es temporada de trabajo para los jugadores. Jaylen Brown es un pilar fundamental del andamiaje de los Boston Celtics, y aquí analizaremos esos puntos en los que debe dar un paso al frente y en aquellos que debe optimizar.

 

Jaylen Brown en busca de la eficiencia ofensiva

 

 

Pocos jugadores en la liga pueden alardear de una mejora constante y progresiva como la de Jaylen Brown. Desde su llegada a la liga, el ex California Golden Bears, muestra un crecimiento sostenido en varias áreas de su juego.

En la temporada 20/21 el de Marietta vio elevar sus números en muchos apartados estadísticos que le valieron su primera convocatoria al Juego de las Estrellas: 24.7 pts, 6 reb, 3.4 ast, con 40% triples y 76% libres.

Posicionado como uno de los mejores anotadores en transición de la liga, codeándose con jugadores como Giannis Antetokounmpo, Devin Booker, Westbrook, Fox y demás, elevó su nivel de anotación de manera considerable.

No es extraño ver a Jaylen Brown tomar el rebote defensivo (4.8 por juego) remontar la cancha y atacar a la defensa en pleno retroceso: 6.1 pts de sus 24.7, son originados por este tipo de jugada, a un nivel de eficiencia altísimo (57.3% solo por debajo del 63% de Giannis).

Su gran capacidad atlética, sumada a su abanico de recursos para anotar con contacto, lo pone en la élite de la NBA en este apartado. Pero esto no se termina ahí, su mejora en lectura le ha permitido asistir a compañeros en las esquinas para triples en transición, cuando el rival logra cerrarle el camino (3.4 máximo en su carrera), volviéndose un arma muy utilizada por los Celtics.

Pese a que nunca destacó por su lectura, el #7 es un maestro a la hora de reconocer oportunidades para explotar la transición, de esta manera, veremos cómo Udoka logra reforzar estas situaciones con mejores opciones a la hora de que el alero ataque el aro.

 

 

El otro generador de puntos para su juego ha sido la media distancia. En la primera etapa de la temporada, sus números eran estratosféricos con rangos de eficiencia top en NBA, hasta que Brad Stevens le indicó que debía tomar más lanzamientos de tres puntos, en detrimento de los primeros.

La observación de Stevens no estaba errada desde el punto de vista de la optimización de los puntos del equipo, pero este cambio en su estrategia anotadora, terminó perjudicando sus números individuales.

Me explico, la dinámica de anotación de un jugador pasa mucho por sus mejores tiros, Jaylen cerró la temporada con 50% en lanzamientos de media (79 de 158), lo cual es excelente, pero iba en contra de lo que pedía el sistema a nivel global.

La media distancia está vedada para los jugadores del montón, pero no así para las estrellas, los porcentajes en tiempos de Playoffs suelen subir porque los anotadores élite son excelentes en este tipo de disparo (Cp3, Booker, Durant, Leonard etc) y su impacto a nivel global está a la vista.

Los porcentajes de Jaylen están a la altura de estos últimos, lo que debe llevarlo de cara a esta nueva temporada a balancear este tipo de tiro con la cantidad de triples tomados. En definitiva, era lo que quería Stevens, pero el jugador no pudo realizarlo de manera óptima.

El pick and roll y las deficiencias defensivas

 

Jaylen Brown anotó 27 puntos contra Denver

Jaylen Brown y la pelota. El alero ha mejorado en su manejo, aspecto clave para el pick and roll

 

Hay cuestiones centrales a trabajar para dar el siguiente paso y una de ellas es la utilización del pick and roll.

Sus porcentajes de utilización del pick desde posición de ballhandler se han incrementado proporcionalmente a como ha mejorado su manejo de balón. La temporada pasada tomó 58 jugadas de este tipo, contra 64 de Tatum, lo que habla de un incremento en este sentido. El problema está en que no se ha involucrado a ambos jugadores en dicha acción.

Brad Stevens prefería poner a Jaylen Brown en una esquina para utilizarlo como tirador de catch and shoot mientras se ejecutaba el pick and roll central, una decisión que tiene explicación, la cual radica en involucrar miss match de velocidad, altura y defensores más fáciles de atacar.

Durante mucho tiempo insistimos en que los dos mejores jugadores ofensivos tienen que correr esta jugada intercalando roles. El ex Cal ha demostrado que puede hacerlo y contar con la amenaza de Tatum en un rol hacia canasta o un tiro de pick and pop o viceversa, es tan lógico como imprescindible.

Udoka, DEBE, ejecutar jugadas de pick entre los Jays y esto es algo que no puede tener discusión en la ofensiva verde de la 21/22.

 

El bloqueo y continuación no tiene que ser algo constante entre ambos, pero sí utilizar esta variable e incluso involucrar al alero restante, como hacen los Clippers con Paul George/Leonard y el tercero en cuestión: Batum/Morris.

El último apartado, y no por ello menos importante, pasa por la defensa. Jaylen Brown es un muy buen defensor de asignación individual. Lo hemos visto mermar a varios de los mejores jugadores ofensivos de la liga, pero el gran problema radica en sus carencias en el sistema y las distracciones en jugadas secundarias.

En un sistema defensivo de alta rotación como los que tenemos en la actualidad, los niveles de concentración deben ser muy altos, porque ante la segunda o tercera ayuda puede perderse el jugador a cubrir.

Esto último es donde suele fallar el alero, ya que muchas veces ante el segundo intercambio, o a la hora de cerrar el eje de cancha, queda en tierra de nadie o llega tarde a cubrir a quien debe.

No hay una solución mágica para esto. La manera de trabajarlo es mediante la ingesta masiva de videos y concentración. La única única variable para que Jaylen Brown se vuelva uno de los mejores jugadores two way de la liga, pasa por una mejora en este apartado.

 

Para finalizar, debemos hablar de una cuestión que está íntimamente relacionada con el punto anterior y es el cierre del box out.

Es recurrente ver que cuando los Celtics sufren algún rebote ofensivo, sea Jaylen Brown el que no lo haya hecho la tarea y esto ocurre por cuestiones de tipo técnicas: perder el contacto con la asignación, el no ganar la posición o incluso la desidia.

La gran mayoría de las situaciones en que esto ocurre pasa por haber perdido la asignación en un cambio de marcación y en no prestar atención a quienes lo rodean y al que debería realizar el cerco reboteador. ¿La solución? tiene el mismo remedio que lo anterior: concentración e ingesta de videos.

A grandes rasgos, estos son los apartados en los que debe mejorar el oriundo de Georgia. Si logra progresar en alguno de estos puntos, podemos estar ante el salto definitivo necesario para pasar de ser un gran jugador, a uno de élite.

Los desafíos están presentes ¿podrá Jaylen Brown afrontarlos? De la respuesta a este interrogante dependerá cuán lejos lleguen los Celtics.


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