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El partido de la semana terminó con un final agónico en el que se enfrentaron dos de las mejores defensas, y también dos de los mejores ataques, de toda la NBA. El baloncesto nos regaló 5 minutos más de este duelo que se terminaron llevando los Clippers 107-104 en el Staples Center, ante unos Celtics que demostraron que pueden competir contra cualquiera.

Más de Gimli que de Légolas

 

Y es que el encuentro empezó con unos Celtics muy concentrados, que estaban defendiendo con tino y encontrando tiros abiertos con facilidad, pero que eran incapaces de meter un triple. Un 0-16 que debería haber supuesto una abultada diferencia a favor de los de casa, pero que con trabajo en la pintura (muy bien Kanter en ataque) y garra en campo propio, se pudo paliar para llegar al descanso 42-40 para los de Stevens.

 

Los Clippers perdieron muchos balones en el segundo cuarto, y es que los Celtics, al igual que el enano del Señor de los Anillos, no lo hicieron bonito y grácil cual elfo, sino que tuvieron que pelear e ir al barro.

 

Y encendieron la calefacción

 

Tras el descanso, ambos equipos salieron mucho más enchufados. Los Clippers metían todo desde fuera, y los Celtics respondían con un Jayson Tatum que parece haber arrancado motores, y con un Wanamaker que está jugando un muy buen baloncesto y le está dando aire a un banquillo excesivamente necesitado.

 

 

Los Celtics llegaron con ventaja al cuarto final, con la habitual aparición de un Kemba desaparecido en combate toda la noche, pero los anfitriones, de la mano de un Beverly que los llevó a la victoria, le dieron la vuelta y se pusieron tres arriba a falta de 18 segundos. Entonces, Jayson Tatum, no muy educadamente, exigió un poco más de lucha.

 

La prórroga fue caótica. Ambos equipos tuvieron opciones hasta el final, pero como dijimos, Beverly se llevó el gato al agua encestando triples como nunca. Stevens eligió su veneno, y el jugador que venía promediando un 18% en triples le encestó 4 de 7 (además de cogerle 16 rebotes). Los Celtics pudieron forzar el segundo tiempo extra, pero primero un triple forzado de Tatum, y luego un tapón de Leonard a un Kemba que no pudo sino sonreír ante lo que se le venía encima, impidieron la remontada.

 

 

Con todo, muy buen partido de unos Celtics que sin Gordon Hayward han demostrado que pueden competir cara a cara con los mejores de la liga. La NBA por fin pudo disfrutar de la pareja de aleros de los Clippers jugando a la vez, y los de Stevens supieron hacer frente al desafío.

Los mejores de Boston fueron: Jayson Tatum con 30 puntos, Marcus Smart con 15 puntos y 8 asistencias, Daniel Theis con 8 puntos, 14 rebotes, 6 asistencias y 3 robos (una pesadez jugar contra el alemán) y Brad Wanamaker desde el banquillo con 14 puntos y 5 asistencias. Por parte de los Clippers: Patrick Beverly con 14 puntos y 16 rebotes, Paul George con 25 puntos y Lou Williams con 27 desde el banquillo.

 

Los Celtics siguen primeros del Este, empatados con los Bucks, y su siguiente enfrentamiento será en la madrugada del viernes al sábado contra los Nuggets en Denver.

Para irnos con buen sabor de boca, os dejo una serie de jugadas de Marcus Smart. Un abrazo.