En otras ligas de verano, con el equipo más centrado en construir, Brad Stevens observaba a sus jóvenes pupilos desde otra perspectiva. Más concentrado en desarrollar que en utilizar, el entrenador de los Boston Celtics podía ir a las Vegas más relajado, sin agobios. Ya no.

 


 

Tras un verano lleno de fuegos artificiales, y con las cuentas a cero, los rookies que han llegado al equipo no van a tener mucho margen, tienen que aportar algo si quieren contar con minutos.

De la misma manera en la que Brown tuvo que adaptarse para sobrevivir dentro de un equipo ganador, los Tatum, Ojeleye, Zizic y compañía, van a tener que buscar ese apartado en el que destaquen y que les haga merecedores de entrar en la pista.

«Estamos viendo cosas que nos llenan de confianza», decía Stevens tras el último partido. «Pero también vemos que queda un largo camino». » A estos chicos se le está pidiendo que hagan muchas cosas, pero nosotros buscamos lo que podamos trasladar a la temporada».

Sin necesidad de brillar demasiado, Semi Ojeleye se está ganando el respeto de Brad haciendo un trabajo oscuro y poco vistoso, defender. Versátil, cambiando muy rápido y llegando a defender gran cantidad de tiros, el #37 está haciendo que su entrenador lo tenga muy en cuenta.

«Creo que va a trasladar lo que está haciendo», comentaba Stevens sobre Ojeleye. «Su flexibilidad defensiva va a ser enorme, creo que va a competir por ser uno de nuestros mejores defensores nada más entrar por la puerta«.

No solo hay palabras para Ojeleye, Brown también ha recibido órdenes. Según el propio jugador, Stevens le ha dicho que se va a tener que encargar de defender a bases y escoltas durante la temporada regular, dando a entender que su papel, con la salida de Bradley, estará más cercano al escolta que al alero.

Siguiendo con los novatos, Ante Zizic va encontrando al jugador que dominaba los tableros en Europa. Tras llegar con las pilas vacías tras el final de la competición en el viejo continente, el pívot balcánico se va sintiendo más cómodo en este baloncesto tan diferente.

«Creo que uno de los problemas con Zizic es que lo situábamos en malas posiciones durante los primeros partidos», dijo Stevens. «Hablé con el equipo sobre alimentarlo mejor en el pick and roll, y ahora todo es más sencillo para él».

Por último, sobre la estrella en ciernes que quiere dominar la NBA a la vieja usanza, Brad ha querido bajar las revoluciones del tren que lo estaba elevando a categorías que todavía le quedan muy lejos. Si bien le encanta lo que está viendo, también ha destacado el largo camino que tiene Jayson Tatum por delante si quiere ganarse el pan en una liga mucho más dura.

«Sabe cómo jugar. Mete canastas, pero también hace cosas que pienso que le han abierto los ojos, porque esta liga es dura. Cuando las defensas son físicas, necesitas elegir mejor tus tiros, tienes que encontrar tus mejores zonas. Todas esas cosas las aprendes con el tiempo».

«Estoy muy entusiasmado con su defensa», comentaba Stevens. «Y eso es algo que, con su envergadura, y consiguiendo ganar fuerza, va a ser muy positivo».

Tatum va a necesitar entrenar otros apartados de su juego para poder llegar a ser efectivo en la NBA. Tanto su tiro de tres como su juego tras bloqueos necesitan trabajo. El jugador podrá aportar en muchos apartados durante su primer año, y si bien su estilo es totalmente diferente al que ejecuta el ataque de Stevens, el talento que atesora es suficiente como para poder ser de ayuda en un equipo aspirante.

 


 

Boston no es una tierra afable. Llueve, nieva y hace frío. Puede que los veteranos no te hagan llevar mochilas de My Little Pony, ni que te llenen el coche de palomitas, cuando llegas al TD Garden no hay hueco para bromas. Este equipo, y estos jugadores, se ponen la verde para ganar, y si no estás preparado para ayudar, mejor no entres al vestuario. No hay tiempo para ser novato.

 

Fuentes:
NBA.com
Foto BradjWard (CC)