Un miércoles cualquiera, me siento y me pongo a escribir tranquilo, pausado y relajado. Los Celtics no juegan hasta el viernes. El último partido fue bien, y ya no me acuerdo de todo el malestar y depresión que me habían hundido la semana pasada.

El podcast que grabamos sumidos en un pozo de oscuridad quedará como una anécdota más, el artículo escrito con pura bilis se perderá en el olvido, y no hará falta que Sergio vuelva con su sección, vamos a guardarla para cosas más importantes.


 

Han nacido los Celtics de la sesión de vídeo

 

Fuera de bromas, dejadme algo de cancha que este equipo confunde hasta a la persona más fuerte mentalmente, tras la gira por el Oeste, el cuerpo técnico, en palabras de Ime Udoka, reunió más de 100 jugadas para demostrar a los jugadores todo lo que habían hecho mal en los últimos partidos.

La idea era hacerles entender que habían perdido la identidad defensiva que les había dado buenos frutos, que se habían dejado llevar por dos partidos buenos desde el tiro, y que les habían pasado por encima en cuanto a intensidad, garra y, sobre todo, esfuerzo.

Parece que ha funcionado.

El partido contra los Bucks es un muy buen punto de salida para volver a la senda de la victoria. El trabajo defensivo fue fantástico, salvo ciertos desajustes con algunas sobreayudas a Giannis, y en ataque se repartieron 31 asistencias con muy buen movimiento de balón.

Sabíamos que podían jugar de esta manera, y es buena señal que hayan reaccionado asi tras la bronca en formato audiovisual. La charla fue sincera, directa, y se dijeron las cosas que se tenían que decir, en palabras de Jayson Tatum. Veremos si les dura el mensaje.

Uno de los problemas de los que hablamos en el último podcast fue el calado de Udoka en el vestuario. Por momentos parecía que, esos jugadores que pidieron su fichaje, no compraban sus palabras. Existe esperanza, visto lo visto.

No vamos a montarnos en una ola de felicidad, de momento, porque conocemos de sobra lo que tenemos en casa. Se vienen partidos duros, en Boston, y esperemos que con la plantilla casi al completo. Hay que agarrarse a algo.

 

La vuelta de Jaylen Brown

 

Más de 100 clips de jugadas, unos 2400 segundos si pensamos que cada uno dura 24, y la realidad es que estos Celtics echaban mucho de menos a su segunda espada.

No me quiero extender mucho con tan solo un partido tras su vuelta, pero era obvio que los Celtics iban a mejorar si Brown podía jugar al 100%. No es casualidad que se juegue mejor con él en pista, ya que la falta de tiro y espaciado que tiene el equipo queda muy reducida al poder contar con otro anotador tan fiable.

 

 

Fijaos que simple es esa jugada. Pero por el hecho de que el 2×2 lo hagan tus dos mejores jugadores, todo cambia. Los defensores tienen que respetar más a Brown que a Schröder o a Smart, lo que libera muchísimo a Tatum para tirar cómodo.

Los Celtics jugaron muy buen baloncesto ofensivo contra los Bucks, tuvieron malos pasajes sobre todo al principio, pero dejaron brotes verdes muy interesantes.

 

 

El baloncesto es un deporte mucho más sencillo cuando mueves la pelota. Aprovechas una ventaja, esperas a la ayuda y empiezas a hacer que la defensa rote. Canasta liberada.

 

 

Esta jugada es muy interesante porque, pese a fallar, se aprecia claramente lo que tienen que hacer los Celtics para conseguir mejores tiros. Además, vemos el lugar que tiene que ocupar Smart cuando no tiene la pelota en las manos: la esquina. En particular la derecha, desde la que anota un 40% de sus triples. La defensa tiene que respetarle, viene en rotación y se consigue otro tiro liberado.

 

 

 

Este es un buen ejemplo del uso del 2×2 entre Horford y Schröder, algo que habían dejado de utilizar tanto como deberían. La defensa tiene que respetar la caída o el pop del interior, y se termina consiguiendo una ventaja de altura con Tatum al poste. Canasta fácil.

 

 

Viendo lo malo se aprecia mejor lo bueno. Dos jugadas sin prácticamente movimiento de balón, o pases muy irrelevantes sin ningún tipo de intención.

 

Por último, quería mostrar dos clips (os toca también sesión de vídeo hoy) de Jayson Tatum, que cada vez que entra en ese modo agresivo de atacar la canasta, se convierte en el jugador que amenazaba con colocarse entre los mejores de la liga. Udoka está intentando hacerle entender que no debe de respetar tanto a los rivales, «que no son su hermano mayor«, y el jugador parece mostrar más hambre y compromiso por pasarles por encima sin ningún remilgo.

 

 


 

El mejor partido de la temporada, sin casi duda. Esperemos que mantengan el nivel, y puedan confirmar la mejoría contra otro de los mejores equipos de la liga, este viernes frente a los Warriors.