“Brad Stevens no va a empezar pateando el tablero”, dijimos en el último Café sin Rick. Nos equivocamos, y Brad mandó a Kemba Walker, el pick 16 de este Draft más un swap de segundas rondas futuras, por -me pongo de pie- Al Horford y Moses Brown.

Las repercusiones en el público celta fueron variadas, desde la alegría del regreso del último center de jerarquía, hasta quienes acusaban de demencia al General Manager, pasando por las lógicas dudas por el estado de salud del dominicano. Pues bien, vamos a ver en qué anda Alfredito y cómo impactará en el juego.

Al Horford y la ofensiva verde

Al Horford fundamental en la victoria de los Celtics

Si, somos oportunistas y por eso ponemos una volcada contra Simmons

Espacio: Algo que viene extrañando horrores la ofensiva de Stevens, especialmente desde la salida de Daniel Theis, es que los centers eran una amenaza sólo cerca del aro. Al Horford agrega la posibilidad del tiro de media y larga distancia.

Como marcamos en el último podcast, este beneficio no lo debemos medir por los puntos que aporte el dominicano, sino por los espacios que les abrirá especialmente a los Jays, que ya no deberán definir contra su defensor y el pívot rival, sino que será un uno vs uno pleno.

Da miedo lo que puedan hacer los Jays maduros con una pintura liberada. Su última temporada en Boston su eFG% fue de 58,6% y en la última temporada en OKC de 52.8%. No sabemos quién será el próximo coach de los Celtics, pero el espacio manda en el baloncesto contemporáneo, y Al Horford trae mucho.

Playmaking: Otra de las cosas que los celtas sufrieron este año fue la ausencia de un jugador que pueda generar ventajas (consistentemente) para sus compañeros cuyo nombre no arranque con “J” y haya sido drafteado por esta franquicia -Perdón Teague-.

Hasta la llegada de Evan Fournier, por lesiones de Kemba, Smart y el bajo rendimiento de Jeff Teague, Brown y Tatum, debían cargar con la ofensiva del equipo, además de anotar defender a jugadores top, explotando su carga de minutos, incluso, con secuelas de COVID-19  y lesiones menores.

El francés trajo orden y aires, que nos dejó ver una versión más eficiente de Jayson Tatum, incluso con la baja de Jaylen Brown.

Al traerá playmakig desde los postes, permitiéndole a las dos principales amenazas ofensivas de los Celtics generarse espacios antes de recibir el balón y no tener que hacer todo desde el ISO (aclarado) o pick and roll.

Más eficiencia, menos desgaste, no sabemos aún a qué jugarán la próxima temporada los orgullosos verdes, pero siempre es bueno tener un jugador con la batería de habilidades de Al Horford para lubricar la ofensiva (los últimos dos conceptos son propiedad del despacho).

Puntos: Todo muy lindo, pero ESTO ES BOSTON. Cuando todo lo anterior falle, el dominicano tiene el talento individual para conseguir puntos en los postes.

Es verdad que ha habido una merma física, pero el dominicano viene de promediar 14.2 puntos en un equipo en él que era la principal amenaza junto a Shai Gilgeous-Alexander ¿Saben cuál fue el máximo jugando en Boston? 14. Viejo es el viento sigue soplando.

Defensa: Aquí es lógico tener dudas por la edad y porque las virtudes de el ex Atlanta se basaban en su versatilidad. Hasta donde vimos la temporada pasada en Oklahoma, ALFREDO ESTÁ BIEN.

Además, contará con al menos uno de los siguientes back ups: Robert Williams o Moses Brown -no vemos a Tristan Thompson quedándose luego de este movimiento- que pondrán el cuerpo ante potencias físicas que dobleguen al dominicano.

La veteranía de Horford debería ayudar a cubrir los errores de la primera línea de Boston, sabrá ubicarse, puntear tiros, tomar rebotes y empujar la ofensiva -mierda que extrañamos esto- y hasta cambiar en más bloqueos que lo que permitían Robert Williams y Thompson.

Nuevamente, no sabemos cómo defenderán a los Celtics esta temporada, pero contar con un jugador que supo estar en el segundo quinteto defensivo en el 2018 no puede ser malo.

No nos meteremos en asuntos vestuario, pero está claro que Al Horford tendrá un impacto positivo, un veterano que siempre mantuvo el perfil bajo, que ha llegado a finales de conferencia en múltiples oportunidades, que tiene buena relación con los pilares del equipo, no puede hacer otra cosa que sumar.

Y en ese último párrafo, está para mí, la clave para entender el trade. Este no era el equipo de Kemba Walker, como tampoco será el de Al Horford. Es el de Tatum y Brown, lo que debe buscar Stevens y la gerencia es complementarlos. y el pívot se complementa mejor que el base, en el juego es tan simple como eso, para números hay otro artículo.

Alfredo protegerá a los Jays en la pintura como mínimo, y el techo es reconstruir con Marcus Smart esa cultura defensiva que diferenció a la Golden Age de Stevens. En ofensiva les dará espacio, bloqueos y, cuando la situación se ponga complicada, un jugador más que pueda anotar y amenace a la defensa.

Ya estoy ansioso de ver de que manera se cierra la plantilla, y de cómo jugarán el pick and pop Tatum y el dominicano. Parafraseando a un expresidente argentino “Hay avances que permiten ilusionarnos”.